¿Qué está pasando con la ofensiva?

En toda la temporada, los Patriots no han agarrado el ritmo a la ofensiva. En sólo 3 partidos se han visto bien y fueron los tres iniciales. Desde entonces, ha habido poco que rescatar de una ofensiva que ha sido cargada por las excelentes posiciones de campo desde donde empiezan y de una excelente defensiva que está rankeada como la #1 en la liga en casi todas las categorías.

¿Qué realmente está pasando con este equipo?

La respuesta es bastante compleja, ya que son una combinación de varios factores pero empezaré con algo que es necesario aclarar desde el principio.

Brady NO es el problema.

Es necesario decir esto porque anoche después del partido, leí a mucha gente que decía que Brady ya no era el mismo, y probablemente no sea el mismo que a sus 30 años, digo, al final de todo tiene 42 años, pero su consistencia y un nivel muy alto siguen ahí.

Los problemas de la ofensiva son la consecuencia de varios factores: línea ofensiva, cuerpo de receptores, ala cerrado y sistema ofensivo.

Línea ofensiva: No es ninguna sorpresa que estés leyendo esto, ya que si has visto a New England jugar este año, te has dado cuenta el poco tiempo que le dan a Brady para deshacerse del balón. El principal problema de la línea estuvo en dos bajas que sufrió el equipo. La lesión por toda la temporada de David Andres, el centro, y las 8 semanas que estuvo fuera Isaiah Wynn. A pesar de que Ted Karras ha suplido de una manera sólida a Andrews, se sigue viendo su poca capacidad para crear huecos que los corredores puedan aprovechar para establecer el juego terrestre dentro de lo que conocemos como “las trincheras”. Y a pesar de que los Patriots nunca hayan sido un equipo que se caracterice por correr el balón, nunca, al menos no recientemente se habían visto las dificultades que se están teniendo este año. Para darle un poco más de contexto a este punto, los Patriots están promediando 96 yardas terrestres por juego este año, rankeados como los #21 en la NFL. El año pasado promediaban 127 yardas terrestres por juego, rankeados como el #5 de la NFL. Y aunque parezca no es mucha la diferencia en cuanto a yardas por juego, lo es cuando comparas que este año promedian 3.5 yardas por acarreo a comparación de las 4.3 del año pasado. Entonces el juego terrestre ha sido claramente deficiente este año y la ausencia de Andrews es una de las razones principales.

En cuanto a la protección del pase, ha mejorado estas últimas dos semanas ya que volvió Wynn, pero mientras estuvo Marshall Newhouse protegiendo el lado ciego de Brady, la línea ofensiva era un completo desastre, Newhouse demostró que ya no tiene el nivel de estar en la NFL, al menos no como titular. Pero ya que ha vuelto Wynn, Brady ha tenido mucho más tiempo para lanzar, el problema está en la siguiente categoría.

Cuerpo de receptores: A principios del año, veía el cuerpo de receptores y pensaba que iba a ser el mejor que Brady había tenido. Desafortunadamente, las cosas cambiaron poco a poco. Demaryius Thomas fue cambiado a los Jets, Antonio Brown y Josh Gordon fueron cortados del equipo y N’Keal Harry se perdió las primeras 9 semanas por una lesión.

A pesar de que Brady nunca se haya caracterizado por tener un gran cuerpo de receptores, la mayoría de las temporadas había sido al menos sólido. Este año, han dejado mucho que desear. El problema está en que simplemente no pueden desmarcarse. Es más fácil decirlo que hacerlo, pero al final de cuentas deberían de crear algún tipo de separación para que Brady pueda repartirles el balón. El único receptor que ha tenido consistencia a lo largo de la temporada ha sido Edelman, quien a pesar de que ha soltado muchos balones cachables este año, está perfilado a tener la mejor temporada en cuanto a estadísticas de su vida. Pero de ahí en fuera, ha sido frustrante ver jugar a los demás. Dorsett, que se esperaba que diera un salto este año, no ha registrado un juego de más de 3 recepciones desde la semana 3 vs Jets. Sanu no ha podido acoplarse al sistema, y ha sido otro receptor que ha sido inconsistente y no ha sido un factor en la ofensiva. Meyers ha tenido poca participación, pero cuando pueden entregarle el balón, hace jugadas grandes, sin embargo, Brady aún no confía tanto en él. Y para cerrar, el último receptor, N’Keal Harry que ha estado activo en 3 juegos y no se han visto ganas de involucrarlo aún en la ofensiva.

Ala Cerrado (TE): Después de una década con probablemente el mejor TE de la historia, Brady se ha encontrado con no tener absolutamente a nadie relevante en esta posición. No sólo para recibir pero también para bloquear. El cuerpo de esta posición consiste en Ryan Izzo, Matt Lacosse y Ben Watson. De los tres, no se hace uno. Ninguno de ellos es ni siquiera sólido en su posición, ni para bloquear, ni para recibir. De Gronkowski a nada.

Sistema ofensivo: Aquí es donde yo siento que estoy más decepcionado de New England. Antes no importaba que jugadores tuvieran a la ofensiva, encontraban maneras de ganar. Vamos, ganamos un Super Bowl con Edelman, LaFell y Amendola como los únicos 3 receptores activos y en contra de una de las mejores defensivas que la NFL haya visto. Este año, McDaniels ha tenido poca creatividad y se ha encerrado en ser conservador por el sentimiento de no tener con qué atacar. A James White se le ha involucrado poco en la ofensiva, el partido pasado fue la excepción, pero lo empezaron a usar una vez de que el partido estaba casi inalcanzable. El uso que le ha dado a los corredores es bastante cuestionable. Michel llegó de Georgia como un corredor muy capaz de ser usado en el juego aéreo, y desde que llegó a New England no lo ocupan prácticamente nunca en ello. Cuando Michel está en el campo, los Patriots corren el 65% de las veces. Esto ha convertido a New England en un equipo extremadamente predecible al ataque. Además de esto, se tiene a Burkhead, que parece que ya olvidaron que era un corredor muy sólido. Ahora le dan el balón no más de 5 o 6 veces por partido. Si New England no encuentra la separación requerida en los receptores, McDaniels tiene que encontrar una manera de involucrar más a sus corredores en el juego aéreo. Tiene que diversificar el uso de sus corredores, tiene que buscar más pases pantallas y trayectorias menos predecibles.

El equipo se ve deplorable a la ofensiva, siendo el 3er equipo que más veces ha despejado esta temporada. Sin embargo, confío en que McDaniels va a sacar adelante esa ofensiva de una manera u otra. Es momento de que enciendan las alarmas y se pongan a trabajar tan duro como nunca si queremos aspirar a una postemporada exitosa.

por Alejandro Romo