Los New England Patriots visitaron a los Jets para escenificar un encuentro entre dos escuadras con una rivalidad añeja, y el encuentro tenía el ingrediente extra de que ambos equipos tienen mariscales de campo novatos dirigiendo su ofensiva.
El análisis.
El partido comenzó con un ritmo lento, con las defensivas imponiendo condiciones, de hecho, en términos generales no fue un partido vistoso. Los Patriots abrieron a la ofensiva, pero no pudieron generar nada en su primera posesión. Los Jets comenzaron mal al ataque, pues en apenas su segunda jugada, Zach Wilson fue interceptado por JC Jackson en su propia yarda 35. New England aprovechó a medias la oportunidad, pues solo pudo conseguir un gol de campo de 46 yardas por conducto de Nick Folk. Los Jets regresarían al ataque, y de nueva cuenta en su segunda jugada, la defensiva de los Patriots volvió a interceptar a Wilson, esta vez por conducto de Adrian Phillips. En esta ocasión la ofensiva de los visitantes si capitalizó con anotación de 6 (acarreo de James White) luego de orquestar una serie de 6 jugadas y 72 yardas. Los Jets responderían con un gol de campo, luego de poder establecer su ataque terrestre y generar una ofensiva de 59 yardas, el marcador se pondría 10-3 a favor de los Patriots. El resto de la primera mitad dominaron las defensivas de nueva cuenta, a Zach Wilson lo interceptaron por tercera ocasión, mientras que Mac Jones era golpeado frecuentemente por los linieros de los Jets, situación que impedía tener ofensivas largas y sostenidas, y no se podía encontrar el ritmo. Particularmente el tackle derecho Yasir Durant tuvo un juego para el olvido, pues fue el responsable de 3 capturas sobre Jones; eventualmente fue reemplazado por Justin Herron y la línea comenzó a jugar mejor. Ya para terminar la primera mitad, los Patriots consiguieron otro gol de campo, con lo que el marcador al medio tiempo quedaría 13-3 a favor de New England.
La segunda mitad fue más de lo mismo. Comenzaron los Jets a la ofensiva, y cuando parecía que podían hilvanar una serie más o menos sostenida, llegó la cuarta intercepción para Wilson, por conducto de Devin McCourty que regresó su robo de balón hasta la yarda 35 de los Jets. Esta ocasión los Patriots aprovecharon la situación anotando con un acarreo de 26 yardas de Damien Harris, quien hasta el momento estaba pasando más o menos desapercibido, pues el ataque terrestre no estaba produciendo mucho hasta el momento, luego de fallar el punto extra, el marcador quedaba 19-3. Los Jets contestaron con una larga serie ofensiva de 10 jugadas, pero fallaron su intento de gol de campo. New England volvería a la carga para lograr otro gol de campo y ampliar su ventaja 22-3, para ese momento ya solo había un equipo sobre el campo, los Jets que habían comenzado muy agresivos a la defensiva, poco a poco fueron perdiendo efectividad, es veían desmoralizados. Los Jets intentaron contestar con una serie larga, pero fueron incapaces de concretar y apenas y cruzaron el medio campo. La ofensiva de New England se estancaría, y en sus siguientes dos series apenas y logró avanzar una yarda. Pero la defensiva de los Patriots ya dominaba por completo a sus rivales, Zach Wilson aparte de errático se le notaba desubicado, no pudo resolver el acertijo que representó la compleja defensiva de New England, y su ofensiva apenas logró generar un gol de campo a mediados del último periodo para ponerse 22-6. En su última serie, los Patriots lograron otro gol de campo, para poner los cartones definitivos 25-6, ya solo estaban consumiendo reloj para finiquitar el partido.
Conclusión
Por segundo partido consecutivo Mac Jones logró conectar más del 70% de sus pases, pero una vez más el ataque aéreo no fue nada espectacular, esta ocasión apenas generaron 159 yardas netas por pase. El ataque terrestre también tuvo una tarde discreta al aportar otras 101 yardas. Cabe destacar que la primera mitad la línea ofensiva fue totalmente dominada por los frontales de los Jets, que en situaciones de pase lograban llegar muy rápido para presionar a Jones, y en el ataque terrestre no les fue mucho mejor, pues un par de ocasiones lograron tackleadas para yardaje negativo en acarreos de Damien Harris, que no tuvo su mejor partido. La defensiva se comportó a la altura, interceptando 4 pases al novato Zach Wilson, y capturándolo detrás de la línea de golpeo 4 ocasiones, además de golpearlo otras 7 veces. A la hora de detener el ataque terrestre no fue efectiva la defensa de New England, al permitir 152 yardas y un promedio de 4.9 por acarreo. En resumen, la ofensiva sigue sin poder concretar en zona roja, el ataque mueve las cadenas pero es muy conservador. La defensiva muy bien en cuanto a la presión, pero mal defendiendo la carrera, eso sí, han aceptado apenas 23 puntos en dos partidos, pero cabe señalar que han enfrentado dos ofensivas por debajo del promedio, los siguientes dos partidos nos daremos una mejor idea de qué tan bien puede rendir nuestra unidad defensiva.
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