Ayer por la noche, se dio a conocer el calendario 2024 de los New England Patriots y en cuanto a nivel de dificultad no hay buenas noticias en Foxboro, ya que si tomamos el récord de nuestros rivales respecto a la temporada pasada, nuestro calendario es el décimo más difícil de toda la liga. Con una apertura y un cierre que no serán para nada cómodos, más si tomamos en cuenta la situación en la que se encuentra ahora el equipo.
El coach Jerod Mayo, como es natural, dijo que hay que trabajar mucho con Maye para que pueda ser QB1 del equipo, por lo que se abrirá temporada presumiblemente con Jacoby Brissett, quien es principalmente un administrador del juego y dependerá mucho de su línea ofensiva y el talento con el que esté arropado para que los partidos en los que participe terminen en triunfos o derrotas.
New England jugará la pretemporada contra Panthers, Eagles y Commanders para probar jugadores (es probable ver mucha acción de Drake Maye en estos juegos) para después tener el corte final de 53 jugadores y preparar la primer visita a Cincinnati.
Si bien es cierto que Joe Burrow viene de una lesión y que Cincy suele arrancar lento, no deja de ser un juego de visitante en la mejor liga del mundo, contra uno de los QBs mas talentosos de liga y la defensiva será determinante para saber si nos ponemos 1-0 o 0-1 en nuestro viaje a Ohio.
Pero el mayor reto vendrá después, ya que luego de ese juego, se vienen partidos contra Seahawks, los Jets de Aaron Rodgers de quienes se esperan grandes cosas si el futuro QB salón de la fama se mantiene sano, 49ers (equipo contendiente al Super Bowl), para luego visitar al que quizá sea el candidato #1 para llevarse nuestra divsión: Los Miami Dolphins.
La cosa no termina ahí. Ésta seguidilla de partidos complicados, se corona contra unos sorprendentes Texans y su QB estelar CJ Stroud quien está rodeado de armas para hacer daño en nuestra defensiva, tarea que luce complicada para el equipo.
Se puede decir que la parte “suave” del calendario viene después, al enfrentar a Jacksonville, Jets (de visita, nada fácil), Titans, Bears que son una incógnita y los Rams. Éste último juego será en los Ángeles, y ya sabemos lo complicado que es ganar un juego de NFL cuando se viaja de costa a costa.
Como verás la parte “suave” del calendario es también un volado, que esperamos resulte favorable para nosotros. Una buena noticia para el equipo es que el bye week lo tenemos hasta la semana 14 y siempre es bueno tener un descanso en la parte final de la temporada pues te empuja a cerrar fuerte el año.
Mucha parte del éxito o fracaso del cierre de temporada dependerá de los Bills, ya que es justo ahí cuando los enfrentamos 2 veces en 3 semanas, y como todos hemos visto, han perdido piezas clave en temporada baja y es muy probable que no sean el equipo tan complicado que han solido ser los últimos años.
La NFL es la liga mas competitiva del mundo y por ende, un triunfo es una joya muy difícil de conseguir y dadas las circunstancias actuales del equipo, el panorama luce complicado. Todo dependerá de qué tan buen ojo se tuvo en el Draft y las futuras contrataciones que haga el equipo pues aún se tiene bastante dinero para gastar en reforzar las partes débiles de nuestro amado equipo.
Pronóstico: 9-8
Por: Iván Mendoza.
Escribir un comentario