Con la temporada del 2022 concluida, la sensación general que el equipo de los Patriots dejó a todos sus seguidores puede ser mas bien de decepción. Después de decenas de temporadas ganadoras en New England, los últimos años han sido difíciles, por así decirlo.
Así como es interesante remontarnos a años ganadores, creo que es importante remarcar los puntos mas bajos de la reciente campaña, esto para tener claro el punto al que se puede llegar sin un trabajo correcto ni un equipo bien entrenado.
Creo que esta temporada puede ser “coronada” con el ya famoso juego en contra de Las Vegas Raiders
Se podría hablar de muchas de las cosas del partido entre los Patriots y los Raiders : De como Las Vegas perdió la ventaja de 17-3 que llevaban al medio tiempo. De la inoperante ofensiva de Mac Jones y compañía, la cual se auto saboteó en la zona roja, Del controversial Touchdown con el que los Raiders empataron el juego en el ultimo cuarto. Pero todos sabemos por que se recordará este juego. Puedes dar click en la siguiente frase si quieres ver a que me refiero:
“…LA MAS TONTA JUGADA EN LA HISTORIA DE LOS PATRIOTS”
Así rezaba parte del encabezado del Boston Globe ese mismo día. No estoy en desacuerdo.
Con el partido empatado a 24 puntos y solo 30 segundos en el reloj los Patriots tenían claro que se tenia que hacer: acercar lo mas posible el balón para intentar un gol de campo. Si esto no se lograba, simplemente se necesitaban terminar el reloj e ir a tiempos extra. En resumen, ser precavidos.
Después de algunas jugadas infructuosas la situación era la siguiente:3ra y 10 con el balón en la yarda 45 y solo 3 segundos en el reloj. Fácil, tienes 3 opciones: Primero. Lanzas un pase profundo, el famoso Ave María, aunque por la posición, el brazo de Mac Jones no sería suficiente y siempre existe el riesgo de una intercepción. Segundo. Te arrodillas y terminas el juego, no es lo mas valiente pero es lo mas seguro. Tercero. corres con el balón. será casi imposible llegar a la zona de anotación pero, mientras no arriesgues el balón, no hay mucho que perder.
Esta tercera fue la opción seleccionada por los Patriots. Entonces, El horror.
El RB Rhamondre Stevenson, quien fue el caballo de batalla de la ofensiva de New England, tomó el balón y comenzó una buena carrera por el centro del campo y hacía la banda derecha mientras el reloj de juego llegaba a ceros. Al ver la inminente tacleada por parte de la defensiva cometió el primer error: lanzar un pase lateral al WR Jacobi Meyers.
El pase lateral es un recurso que solo se debe de utilizar cuando no hay ningún otro, debido a lo riesgoso que es. Meyers tomó el balón y en un error aun más grande lanzó un pase atrasado al centro del campo con la intención de que lo recibiera el QB Mac Jones. El pase fue atrapado por Jones, pero el Jones de los Raiders Chandler Jones quien, curiosamente, solía jugar en los Patriots.
Después de asegurar el balón y eludir el débil intento de tacleada de Mac, simplemente corrió hasta la zona de anotación terminando con el juego y probablemente con las aspiraciones de clasificación de New England.
Los Raiders ganaron 30-24.
¿Qué pensaba Stevenson? ¿Acaso con la euforia de lo que parecía una buena carrera tomo la decisión equivocada? ¿Qué pensaba Meyers? ¿Esperaba que Mac Jones tomara el balón a medio campo y llegara hasta la zona de anotación?
La versión oficial es que estas decisiones NO vinieron por parte de los entrenadores. Meyers comentó después del juego, en una entrevista en la que se le veía claramente afligido, que la indicación fue la de jugar conservadores. Creo que esta es la parte que mas me duele de la situación. Meyers ha sido un elemento importante de la ofensiva y lamentablemente este error puede marcar su carrera permanentemente.
Esta jugada pasará a la historia como la mas grande pifia del Equipo de Massachusetts. Superando incluso al “Miami Miracle” de hace 4 años.
En el anecdotario cultural, solo se me ocurren 3 jugadas similares en la historia de la NFL, puedes ver cada jugada dando click en el renglón correspondiente:
– Jim Marshall de los Minnesota Vikings corriendo para el lado equivocado del campo.
Aun cuando el error no es del entrenador sino del jugador, personalmente siento que este es un reflejo claro de lo que la dirección de los Patriots fue durante la temporada regular: Un equipo sin disciplina ni esencia ofensiva, sin coordinación ni ritmo. En esta ocasión, lamentablemente, lo que pasa en Las Vegas, no se quedará en Las Vegas.
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