La temporada de los receptores de New England fue bastante promedio para algunos y decepcionante para la mayoría, y esto fue un factor que sin duda complicó las cosas para los Patriots, pues toda vez que se encontraron abajo en el marcador por una desventaja considerable (15 puntos) fueron incapaces de responder.
Pese a que en temporada baja, una de las principales tareas del equipo fue rodear a Mac Jones de manos que atraparan sus pases, el experimento no funcionó.
Hunter Henry y Jakobi Meyers (quien ya estaba en el equipo) fueron los objetivos principales del novato y sus hombres de confianza, sin dejar de lado a Kendrick Bourne, el único receptor que rindió de los que llegaron vía agencia libre.
Jones tiene las cualidades pero es muy difícil trabajar cuando no tienes las piezas adecuadas a tu alrededor.
Si vemos de nueva cuenta el juego de wildcard en Buffalo, podremos darnos cuenta de la cantidad de balones que Jones puso en las manos de sus receptores y estos simplemente no los atraparon.
Dante Scarnecchia, quien fuera por mucho tiempo el entrenador de la línea ofensiva del equipo, observó el mismo problema y opinó al respecto:
“Siempre teníamos a ese chico, a ese que movía las cadenas. Ya fuera Wes Welker, Julian Edelman o Danny Amendola cuando los demás fallaban, ese era el chico. Pero los Patriots no tienen a alguien así ahora. Mac necesita un mejor cuerpo de receptores alrededor de él porque, tal vez no les guste escuchar esto pero además de Jakobi Meyers no tienen a nadie más”
Sin opciones confiables a la hora de tener el balón, tu ataque se vuelve unidimensional, predecible, fácil de detener.
Se tenían grandes expectativas en Nelson Agholor y Jonnu Smith, grandes nombres que no resultaron baratos, únicamente en su producción.
New England debe buscar un hombre de seguridad para Jones, alguien que siempre esté ahí en los momentos complicados del encuentro para obtener primeros y diez vitales. Y sin duda, trabajar con Agholor, Smith y compañía toda la temporada baja es aún una buena opción, son hombres con talento pero hay que hacerlos brillar.
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